Muchas veces nos hacemos preguntas sobre qué hacer, qué decir, cómo actuar y esperamos respuestas concretas con la información textual
como si estuviéramos buscando información por Internet.
Las respuestas muy pocas veces son del tipo “dobla a tu
derecha”, tan explícitas, la mayoría de las veces son pistas que nos llevan a
que cada uno de nosotros explore las respuestas, allí radica la riqueza. El no
entender esas pistas hace que con más frecuencia sintamos que no tenemos
respuesta, que nadie nos escucha, que estamos solos, pero esta sensación se da
porque creemos que no se cumplieron nuestras expectativas. Y sin embargo la respuesta
estaba ante nuestros ojos, antes nuestro oídos, la podíamos tocar y hasta
sentir su aroma y sabor, pero como intentábamos decodificar con la mente,
perdimos la mayoría de la información.

Poco a poco con práctica podrás ir entendiendo el idioma del
Universo, hablarás su mismo idioma y todo se volverá más claro, comenzarás a
percibir como las sincronicidades se desarrollan ante tus ojos, como todo se va
ordenando y va tomando su justo lugar.
Si aun así la respuesta no es la que esperabas, confía, pues
mas desafíos te estarán esperando para que de esta manera puedas contar con
todas las herramientas que te permitan encontrar la respuesta. Permítete
viajar a tu interior donde residen todas las respuestas. Solo allí, buceando en
lo conocido buscando lo que creemos desconocido hallaras tu templo.
Déjate llevar.
Con amor,
K-Luna